¿Por qué
estaba abierta la puerta?
Siento temblar a la ciudad
¡escucho gritos!
Los oscuros y asquerosos rascacielos
están desnudos.
Escucho el sonido de un tren
eso me da algo de calma.
Los pasillos del subte huelen a fracaso
la gente se atropella sin necesidad.
Algún escupitajo moja una vereda mugrienta,
por mis venas corre algo de melancolía,
no mucha, lo suficiente como para
sensibilizarme
ante tanta putrefacción.
No voy a torturarme en pensar en mis horas
perdidas.
El recuerdo de la puerta del garaje abierta
es imborrable
la muerte se presentó de lleno.
El humo de la chimenea.
Ediciones del Dock, 2009.
El
deseo
Una simple alucinación,
aunque quizás moribunda.
Nos costó llegar, tuvimos
que cruzar un bosque con árboles gigantescos.
Cuando llegamos al pie de
la montaña no había más de veinte casas.
El tiempo parecía haberse
detenido.
Los pocos habitantes
parecían hermanados,
los niños jugaban
libremente.
Eso sí, el viento soplaba
con furia, con mucha saña.
Esa noche había una
fiesta, ¿qué se festejaba?
La llegada de los nuevos
habitantes.
El lugar parecía estar
fuera del mundo.
Fragor de borrascas.
Ediciones del Dock, 2011
Condenados
Balumba
de papeles.
Una
jerga aprende de otra jerga.
En una misma
mesa
unos
escriben poesía,
otros
falsifican dinero.
Ambos
roban,
trafican
despojos
y ambos
están condenados
a
seguir al papel
sin
recibir el tonto premio de la eternidad.
Y ambos
necesitan
del silencio cómplice.
Estación de
chapas. Ediciones del Dock, 2013.
Changas
Chau
Roberto
seguí
pedaleando a la todo terreno,
atrás
dejaste la estación de Munro,
el
cementerio de tus sueños
y el
nunca terminado revoque glacial de la pensión,
la
pesada mochila sobre la espalda
te está
matando.
Viento bravo
de la
peor calaña capitalista,
te
bajan de costado
y la
levantan en pala,
después
te dejan
como
desaparecido social,
sin
gremio, sin sueldo, a la deriva.
Estación de
chapas. Ediciones del
Dock, 2013.
Dolor
absurdo
En los
trenes
me
aferré
a la
palabra más bella:
libertad.
Aprieto
las manos.
Silencios
penetrantes bajan del descampado,
aúllan
dolor.
Aciago
momento.
Realismo
brutal.
Mi
rostro es de rabia.
Cadenas
y candados
y el
odio se hizo crisis lentamente.
Aire
cipayo.
El fin
del ferrocarril.
Estación de chapas. Ediciones del Dock, 2013.